Un hombre tenia una viña fuera de la ciudad, un día fue a recorrer todo cuanto tenia. Por el camino contemplo todo a su alrededor y se dijo: “que bella es mi viña y solo a mi me pertenece”, “que bella es contemplarla de mañana, de tarde y de noche, y sabiendo que todo es mío cuanto me rodea”.
Tres días después volvió a recorrer su viña y en el transcurso de su caminata vio a una paloma muy hermosa, la contemplo de lejos y se dijo: “que bella y hermosa es”. Se acerco lentamente hacia ella, extendió su mano y la toco; sorprendido el hombre porque la paloma se dejo tocar, saco rápidamente de su bolsillo un poco de maíz y echándoselo en la palma de su mano se lo acerco a la bella paloma y ella comió de su mano, y el hombre la codicio para sí.
Al día siguiente al levantarse por la mañana, vio cerca de su ventana a la bella paloma, corrió hacia ella y saco un poco de maíz y lo puso cerca de ella para que lo comiera. El hombre no pudo mas con su deseo de tenerla, tomo a la bella paloma y la puso en una jaula, para que no pueda escapar.
El la contemplaba de día y de noche y se decía: “es mía y solo mía; su hermosura y su belleza me pertenecen; ¿quién podrá arrancármela de mi vida?”.
Pasaron los días y la bella paloma perdía su color, - el encierro la sofocaba, - el hombre al ver que la bella paloma se moría, por su mejillas corrieron lagrimas, pues el dolor lo agobio al no saber que hacer para que la paloma se sintiera bien.
La saco de la jaula y saliendo de su casa a paso ligero se adentro a su viña y la llevó donde la había encontrado por priera vez.
Con lagrimas en sus ojos fijo su mirada en la bella palomita, y dijo: “perdóname, no quise lastimarte de esta manera y mucho menos ocasionarte una herida tan profunda, encerrándote en una jaula”, “yo te dejo libre bella palomita, extiende tus alas y toma vuelo, eres libre”, “prefiero verte viva y libre, como cuando te vi por primera vez, antes de verte muerta por mi culpa”, “toma aliento palomita mía y vuela hacia tu libertad”.
La bella paloma desplegó sus alas y tomo vuelo, alejándose del hombre sintió la libertad.
El hombre fijo sus ojos al cielo y dijo: “¿volveré a verte bella paloma?, ¿volveré a contemplarte?, ¿volveré a tocarte como la primera vez?, no lo sé, pero sé que mi viña no será la misma sin ti, porque eras la que le daba vida, vida a mi vida.
Muchos actuamos de una manera inapropiada en nuestras vidas, codiciando, deseando, y otras cosas que no son gratas al señor. A veces ahogamos a la persona que amamos, solo viendo nuestra propia conveniencia y no de la otra persona; también alardeamos de lo que tenemos y no vemos lo que realmente nos falta; también tenemos lo que queremos (lo que anhelamos), pero no sabemos valorarlo y mucho menos cuidarlo; y cuando lo tenemos por perdido nos damos cuenta de lo valioso que era para nosotros. Pues esta es la naturaleza del hombre una vida imperfecta, de tristeza y de dolor. Pero la obra que DIOS hace en nuestras vidas es perfecta, nos guía por caminos rectos, porque en él hay verdad y no maldad; justo y recto es él. Los que andan en los caminos del Señor y ponen por obra sus enseñanzas, serán perfectos como él es perfecto.
4 Él es la roca, cuya obra es perfecta, porque todos sus caminos son rectos. Es un DIOS de verdad y no hay maldad en él; es justo y recto.
Dt. 32.4
21 ...Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dalo a los pobres y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
Mt. 19.21
48 Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que esta en los cielos es perfecto.
Miguel Garcia
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